En los últimos días el dólar ha mostrado una tendencia alcista en su cotización. Si miramos su evolución desde principio de mes a la fecha, podremos notar que acumula una suba del 1,54%, la cual se debe mayormente a los movimientos que se iniciaran la semana pasada luego de que Argentina no ingresara a la categoría de país emergente en el índice que elabora el MSCI.
Sin embargo, si ampliamos el horizonte a todo el año, podremos notar que el dólar ha subido tan sólo un 4,17% por lo que inversores que han colocado su dinero en la divisa han perdido poder adquisitivo.
Más allá de esto, es de esperar que en los próximos meses la oferta de dólares comience a mermar por lo que podría comenzar a verse una suba en la cotización de la divisa estadounidense. Esto se sostiene en el hecho de que durante la primera mitad del año hubo una fuerte presencia de oferta de dólares por el lado del blanqueo de capitales (entre ellos el 30/06 van a estar nuevamente disponibles los dólares líquidos que fueron depositados por quienes ingresaron a fines de diciembre), la cosecha del campo y una fuerte emisión de deuda por parte del Estado Nacional. En este último aspecto, se ha cumplido gran parte del programa de financiamiento del año buscando anticiparse a la suba de las tasas internacionales, por lo que es de esperar que empiece a disminuir la presión bajista en el tipo de cambio que implicaba cada emisión de deuda (el Gobierno Nacional vende los dólares que cobra de los inversores para pagar sus gastos corrientes en pesos).
¿Cómo posicionarse en dólares?
Para aquellos inversores que ven que el dólar puede empezar a subir, pero que no quieren estar muy expuestos al riesgo de tasa en medio del contexto electoral, el mercado de capitales ofrece atractivas alternativas con un riesgo bajo.
Entre ellas se destacan las ampliamente difundidas Letes del Tesoro que rinden según el plazo entre 2,85% y 3,4%, permitiendo comprar dólares a un tipo de cambio de hasta $15,62.
Sin embargo, existen ciertos bonos en dólares y dólar linked que están rindiendo por encima de esos valores o qué permiten a similar plazo de vencimiento pagar un importe menor por cada dólar. Entre ellos podemos destacar al Bonad 2018 (AM18) y el Bonar 2018 (AN18) como figura en la tabla a continuación:
Este tipo de instrumentos son herramientas que permitirán pasar el clima electoral sin demasiados sobresaltos, ya que si el mercado ve que crecen las intenciones de voto de Cristina Kirchner en la provincia de Buenos Aires podría hacer subir los rendimientos de los bonos del tramo medio y largo de la curva soberana (y por ende hacer caer su precio).
Nota Publicada por El Economista – 28/06/2017